Tacos de Picaña
Los tacos son sinónimo de sabor, frescura y tradición, pero cuando los elaboramos con una pieza tan especial como la picaña de vaca Okelan, el resultado se eleva a otro nivel. En esta receta rápida y sabrosa descubrirás cómo transformar un corte de carne único en un bocado lleno de matices: jugoso, especiado y con el toque fresco de la lima y el aguacate.
Una propuesta sencilla, lista en menos de una hora, ideal para sorprender en casa y disfrutar de una experiencia gastronómica con sello gourmet.
Preparar los ingredientes
Comenzamos con la protagonista de la receta: la picaña de vaca Okelan. Corta la pieza aproximadamente por la mitad y decide si prefieres conservar o retirar la grasa (para esta receta recomendamos quitarla, aunque es opcional). Con un cuchillo bien afilado, corta la carne siempre en sentido contrario a las fibras y después en dados pequeños para que queden jugosos y fáciles de manejar.
En un bol grande mezcla la carne con los pimientos picantes y el ajo bien picados, añade las especias (orégano, comino y pimentón dulce), una pizca de sal, el zumo de media naranja y de una lima, además de un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Remueve bien para que la carne se impregne de todos los sabores y deja reposar en la nevera unas dos horas. Este marinado es la clave para que la carne adquiera matices frescos, cítricos y ligeramente picantes.
Salsa de aguacate
Mientras la carne se marina, podemos preparar la salsa. En un vaso batidor coloca un aguacate maduro, dos huevos cocidos, el zumo de una lima, sal y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Tritura a máxima potencia hasta obtener una textura cremosa y untuosa, similar a una mayonesa. Si eres amante del cilantro, añade unas hojitas frescas para potenciar el frescor. Esta salsa será el acompañamiento perfecto para equilibrar el toque picante de la carne.
Montar los tacos
En una sartén antiadherente, primero haremos una quesadilla, para ello, calentamos las tortillas por las dos caras. Añadimos queso, unas cucharadas de salsa de aguacate y tapamos con otra tortilla. La sacaremos a un soporte cuando se haya fundido el queso. Rellenaremos las quesadillas con nuestra carne, una cucharada de salsa de aguacate y decoramos con cebolleta picada, cilantro y unas tiras de lombarda. Terminamos los tacos con un chorrito de aceite de oliva de guindilla que le dará un toque riquísimo.
Cocinar la carne
Tras el tiempo de reposo, llega el momento de darle calor. Calienta una sartén amplia a fuego alto, añade un poco de aceite y cocina la carne durante 3 o 4 minutos, removiendo para que se dore por igual. El objetivo es que quede jugosa por dentro y con un toque dorado por fuera. Retira del fuego y resérvala.